miércoles, 23 de enero de 2008

El Valencia fue un juguete en manos del Submarino

El Vila-real dominó totalmente el partido y ganó con autoridad (3-0)

Fue la noche soñada por afición, jugadores y técnicos. Durante la semana, habían dudas de como se presentaría el partido, ya que el Valencia parecía recuperado en cuanto al juego respecto a las últimas jornadas, y el Vila-real dejaba dudas, sobre todo en casa. Pero el equipo amarillo volvió a ser el de principio de temporada, jugando incluso, según la mayoría de opiniones, el mejor partido en mucho tiempo, y no dió opción a un Valencia sin espíritu.
El primer gol no se hizo esperar. A los seis minutos, Pirès empezaba una carrera por la banda, le hacía un traje a Arizmendi, y llegaba al vértice del área, donde se la dejaba a Cani, este a Nihat, y Pirès se la "quitó" al turco para, con un gran disparo de punta a punta del área que casi entró por la escuadra, batir a Hildebrand y hacer el 1-0.
El Vila-real siguió con su buen juego, sin apenas pasar apuros con defensa, haciendo un gran trabajo en el centro del campo con Bruno y Senna, y volviendo loco en ataque al Valencia, donde la aportación de un gran Cani y de un muy mejorado Pirès, hacian temblar al Valencia cuando el balón llegaba a Rossi o Nihat.
El turco tuvo hasta cuatro ocasiones para aumentar la ventaja en la primera parte. Primero, tras una gran asistencia de Cani, su disparo salió un poco desviado. Posteriormente, estrelló un lanzamiento de falta en el palo, y en otra hizo lucirse al portero alemán del Valencia. En los últimos compases de la primera parte, Rossi, tras una gran jugada, le hizo un pase que le dejó solo ante Hildebrand, pero por segunda vez, el disparo del turco impactó en el palo.
Por su parte, el Valencia no encontraba la manera de hacer peligro, y la única ocasión que tuvo en la primera parte -y prácticamente, en todo el partido-, fue un disparo lejano de Baraja, que eso sí, estuvo a punto de convertirse en el empate, pero entre Diego López y el larguero lo evitaron.
En la segunda parte, la superioridad del Vila-real fue, si cabe, aún mas manifiesta. Cani avisó de que el Vila-real buscaba el 2-0 en una gran jugada personal que acabó con un disparo al larguero. Y en la jugada siguiente, Nihat sirvió un córner que peinó Godín y Capdevila, libre de marca, sólo tuvo que empujar el balón al fondo de la red. El Vila-real mató el partido, ya que aunque aun faltaba media hora para el final, el Valencia no mostraba ningun intento de reacción. Y tan solo siete minutos más tarde, en el 69, llegó el definitivo 3-0. Cani salvó un balón que estaba a punto de salir fuera de banda, y lo aprovechó Rossi, que ante las facilidades de la defensa valencianista, corrió hasta el área, donde asistió a Nihat, que ante la salida de Hildebrand, marcó el 3-0 con una gran vaselina. El turco por fin encontró su recompensa en el partido, y ya lleva 11 goles en liga.
Más tarde, tras una asistencia de Cani, Rossi lo tenía todo a favor para hacer el cuarto, pues estaba solo delante de Hildebrand, pero resbaló y el arquero valencianista aún se pudo hacer con la pelota. Finalmente, 3-0 en un partido donde el resultado pudo ser aún más abultado, pero lo importante es el gran juego que desplegó el equipo, los 3 puntos, y el hecho de dejar la porteria a cero, que en total, le permiten al Vila-real ponerse de nuevo en posición de Champions League, ocupando la tercera plaza.

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